En casa de los Pragapati, en Bhaktapur (Nepal), hoy es un día importante. Purnima tiene 7 años y acaba de pasar el Bahara, un rito ancestral de la cultura newar, la etnia más numerosa del Valle de Kathmandú. La familia entera ha venido a presenciar el rito y hoy todos se quedan a comer, aunque no lo harán a la vez. Entonces, ¿cómo se come en una celebración hindú?
El primero en comer en una celebración hindú es el abuelo, por ser el mayor de los presentes, el más anciano de todos. Aunque a pesar de ser el primero en la jerarquía, tiene a alguien encima de él: los ancestros, que en celebraciones importantes siguen estando presentes y ha de reservárseles una porción de comida, que elige cuidadosamente de su plato y coloca en otra hoja de palma. Porque los muertos también comen.
El siguiente es el hombre de la casa, Yaman, porque es el varón. Su mujer, Laxmi, le sirve a él, poniendo especial detalle en la cantidad que quiere su marido, que se sabe de memoria tras más de 10 años de matrimonio. Y después, uno a uno, son servidos los invitados, aquí no importa cuál sea el género. Ellos y ellas comerán (en el suelo, como todos) mientras Laxmi está pendiente de que a nadie le falte comida cada vez que alguien pide que se ponga una ración más en su plato. Ya ha aprendido a controlar su hambre mientras ve a los demás comer, pues tiene que esperar paciente a que todos terminen, y sólo tras recoger y limpiar los platos de los demás podrán sentarse a tomar su ración.
Aunque según en qué zona estemos y según si es una comida diaria o con motivo festivo, puede ocurrir que los invitados sean servidos los primeros, antes que el cabeza de familia y que éste incluso tenga que esperar a que los invitados acaben de comer para poder empezar su turno. Mientras nosotros en España esperamos a que todos los comensales se sienten a la mesa para dar el primer bocado, aquí la buena educación es que cada uno coma en su turno y espere religiosamente a que acabe otro para poder comer él. En todo caso la mujer, la esposa, en quien recaen todas las tareas de la casa, comerá la última, siempre que todos hayan acabado y haya fregado sus platos.
El orden en que se sirven los alimentos también es importante, que dependerá, claro, del menú de cada día. E importantísimo, como contábamos en comer con las manos: los alimentos han de cogerse única y exclusivamente con la mano derecha, dejando la mano izquierda para beber agua (y para la limpieza de partes nobles e innobles).
Último consejo: no pedir más de la cuenta. Aunque lo quieras probar todo, aunque haya algo que no te guste, aunque tu lengua no soporte el picante, asegúrate de que acabas todo lo que Laxmi puso en tu plato. O sino tendrás que escuchar la tímida pero segura reprimenda de Yaman: “Dios ha puesto estos alimentos en nuestro plato y tenemos que estar agradecidos. No está bien pedir que nos sirvan más de lo que luego vamos a comer”.
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