¡Nos vamos a Navarra! Hoy, que es un día grande en San Fermín 2015, la fiesta por excelencia de los pamplonicas, ponemos rumbo a una ruta para disfrutar de las gastronomía de esta comunidad y no perdernos detalle del buen comer durante esta festividad.
El chupinazo dio ayer comienzo a una semana donde la marea roja inunda esta ciudad (¡No olvidarse el pañuelo rojo anudado al cuello!). Y nosotros a lo nuestro, al buen comer. Lo de correr delante del toro lo dejamos para otros. Eso sí, preparémonos para un finde de ebullición constante, calles repletas de gente, bares a rebosar, y txakoli, mucho txakoli.
Eso sí, oferta gastronómica all day long. A primera hora de la mañana, antes o después de los encierros, es buena idea tomar calentito, y encontramos dos opciones. O el tradicional chocolate con churros o un caldito calentito mientras ves las dianas, el recorrido de la banda de música por las calles del centro de Pamplona. O la chistorra, ya sea con huevo y patatas o en bocadillo es uno de los manjares de-toda-la-vida perfecto para reponer las energías tras una noche de fiesta por Pamplona.
Y para comer bien, de cuchara y en una buena mesa, esta zona nos ofrece grandes recetas populares gracias a los excelentes alimentos de la huerta navarra y a la calidad de sus carnes. Como el estofado de toro, donde la carne de primera calidad se acompaña de patatas y verduras. O unas pochas, plato típico elaborado con alubias, chistorra y chorizo, longaniza, además de tomate, pimientos y ajo. Y si lo tuyo es el pescado, tranquilo. ¿Sabes lo que es el ajoarriero? Un plato creado a partir de patatas, huevo, y ajo, huevo, todo machado como base de un pescado, generalmente, bacalao. Y no nos olvidemos de uno de los alimentos que caracterizan esta tierra, los espárragos blancos, protagonistas de una amplia variedad de recetas y pintxos.
Como recomendación para degustar las tradicionales recetas navarras locales como La Chistera (en la plaza de San Nicolás), el restaurante San Fermín (en calle San Nicolás) o Amóstegui (en la calle del Pozo Blanco) son opciones más que válidas para ello, con una ubicación perfecta en el centro de la ciudad, para no perderse nada de esta memorable festividad.
De pintxo en pinxto
La chistorra, además, es un ingrediente clásico de los afamados pintxos pamplonicas. Chistorra con huevo, pimientos de piquillo, espárragos, las magras con tomate… Como ocurre en Euskadi, Pamplona también aguarda entre sus calles algunos de los mejores establecimientos de pintxos, con barras colmadas de pequeñas obras de arte gastronómicas para degustar con un txacoli, vino, vermouth o cerveza.
¿Dónde podemos encontrar estas exquisiteces? Por los alrededores de la Plaza del Castillo, donde se sitúa el mítico Iruña. Cerca de allí, para ir en busca del pintxo perfecto podemos dirigirnos a la calle Comedia o San Nicolás, donde esperan locales como Baserri, lugar donde disfrutar de delicias como su pintxo de bacalao ahumado al aceite de olivas negras y vinagreta de tomate, o San Nicolás Cocina Vasca, que cuenta con zona de bar, restaurante y también espacio dedicado a la noche, donde la música toma protagonismo para disfrutar de una copa con amigos. Asimismo, para degustar pintxos es posible acercarse a la calle Espoz y Mina (como el local Gaucho, donde ofrecen “alta cocina en miniatura”, tal y como ellos lo definen) o Estafeta, conocida por ser calle para los encierros, y donde también se ubica otro de los establecimientos más tradicionales, el Fitero.
Si nos lo proponemos podemos ser partícipes de nuestro propio “encierro” con una ruta de tapeo por los bares que marcan el recorrido de los encierros reales. ¿Alguien preparado?
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