Bukowski escribió que “si algo malo pasa, bebes para intentar olvidar; si algo bueno, bebes para celebrar; y si nada pasa, bebes para que hacer que algo pase”.
Fue un gran bebedor, además de un magnífico novelista y poeta. Bebió mucho, y de todas las castas, pero al final, ya convertido en autor reconocido, este escritor “maldito” bien sabía distinguir un buen trago. Es lo que tiene lo bien hecho. Que se disfruta y sabe mejor. Ejemplo de ello es Ginbear, una ginebra que habría hecho las delicias de nuestro escritor.
¿Cuántos ingredientes pueden formar una ginebra? En el caso de nuestra “ginebra oso” 15 ingredientes, en total. Nunca pensamos que un ginebra pudiera llevar tanto ingredientes tras de sí, ¿verdad? Pues sí, 15, entre especias, flores y frutas. Preguntamos por ellos y nos comentan: “Son siete tipos de frutas muy frescas, enebro, canela, cilantro, cardamomo, raíz de angélica, raíz de orris y regaliz… ¡Más un ingrediente secreto! Y claro, nos quedamos sin saber cuál es ese secreto que la hace especial…
Se trata de la ginebra más castiza. Nacida en las entrañas de Alambique de Santa Marta, un pequeño negocio familiar que nacía en 1999 y que hoy cuenta con prestigiosos galardones como el Master Ginmotive 2014 a la mejor ginebra. Formando parte de su esencia, el oso y el madroño madrileño copan su imagen, para rendir homenaje a la ciudad que vio nacer esta compañía. “Después de 15 años elaborando licores, teníamos una asignatura pendiente que venía marcada por las exigencias del mercado: destilar una ginebra de muy alta calidad y a ser posible diferente de las demás; con su propia personalidad, cuenta José Manuel Sandín, presidente y fundador de Alambique de Santa Marta, quien comenzó en 1999 este negocio, que continúa hoy junto a sus tres hijas, Ana, Beatriz, y Cristina.
Para Sandín este ginebra supone un triple resultado: “sabor profundo, suave y perfumado”. Y sus 40 grados. Pero si hay algo que hace diferente a este ginebra es el proceso de elaboración. Una vez más aplaudimos lo artesanal. Tanto es así, que toda la mecánica encargada de la destilación es como la de siempre, y su material el mejor para la destilación, de cobre. De toda la vida. Para conseguir que esa mano artesana sea real, en estado puro en un proceso que comienza con “la selección de las mejores materias primas. Después maceramos, destilamos en alambique de cobre -el aparato que sirve para destilar-, y embotellamos. La diferencia de esta ginebra es que la mayoría de las ginebras maceran sus ingredientes durante 24 horas y se destila. Sin embargo, nosotros maceramos los ingredientes durante 12 ó 15 días y posteriormente se destila el 100% en alambique de cobre”, recalca Sandín.
Para servir y tomar, una recomendación: “Ginbear es tan completa en olor y sabor que no es necesaria potenciarla más con condimento alguno, se puede consumir perfectamente sola. En cualquier caso, una pequeña corteza de cualquier cítrico o un madroño, para dar color, puede complementar el aspecto visual de la copa o con tónica neutra -y aquí especifican, que si lo tuyo es el gintonic, lo ideal es 5 centilitros de Ginbear y 20 centilitros de tónica-.
Una empresa familiar apostando por nuevos retos
Pero Alambique de Santa Marta es más que un ginebra. Porque este pequeño negocio comenzó con la elaboración de orujos y licores, y hoy Alambique de Santa Marta sigue siendo también licor de café, licor de orujo… Vamos que no será por variedad de bebidas. Y en esa obsesión por continuar lo artesanal, esta familia se ha embarcado en su faceta más docente, con cursos formativos para aprender qué es esto de la destilería. Para ello, han creado la primera Aula de destilación, donde los alambiques se despliegan por las mesas para que los alumnos experimenten y vivan de primera mano todo el proceso.
Y a todo ello se suman nuevos retos. Javier Pulido, profesor de la Cámara de Comercio y experto en destilados, incorporado a la empresa familiar como profesor de destilería, acompañará a la familia en un nuevo objetivo, la elaboración de un ron que será destilado y envejecido en barricas de roble, el primero en ser destilado y embotellado en la región de Madrid. Será, entonces, el ron más castizo.
Al preparar este artículo se nos ha hecho la boca agua con:
Alambique de Santa Marta
Calle Tres, nº 5 (28864) Ajalvir Madrid
Teléfono: 91 884 46 87
Alambique de Santa Marta
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